La natilla es un postre tradicional español hecho a base de una mezcla cremosa y parecida a la crema pastelera. Aunque la natilla suele elaborarse con azúcar y otros edulcorantes, una alternativa más saludable es una versión sin azúcar. Elaborada con ingredientes naturales y sanos, una receta de natilla sin azúcar es una forma estupenda de disfrutar de un postre delicioso sin sentirte culpable. Aquí tienes todo lo que necesitas saber para hacer tu propia natilla sin azúcar, incluidos los ingredientes, los pasos de preparación y algunos consejos para personalizarla.
¿Qué es la natilla?
natilla es un postre tradicional latinoamericano. natilla es un postre tradicional latinoamericano hasta alcanzar una textura cremosa. El postre puede servirse caliente o frío, y suele adornarse con canela u otras especias. La natilla es un postre favorito en Navidad y se suele servir como delicioso acompañamiento de las comidas.
¿Qué diferencia la natilla sin azúcar?
Una receta de natilla sin azúcar utiliza una combinación de edulcorantes naturales, como la miel o el sirope de arce, para sustituir el azúcar tradicional. También utiliza leche baja en grasa o desnatada como base, y puede incluso incluir otros ingredientes sanos, como semillas de chía o leche de coco. Esto no sólo hace que la receta sea más sana, sino que también añade un sabor y una textura únicos al postre.
Cómo hacer natillas sin azúcar
Hacer natillas sin azúcar desde cero es más fácil de lo que uno cree.
- En primer lugar, reúne los ingredientes.
- 4 tazas de leche de almendra (o cualquier leche desnatada o descremada)
- 1/4 de taza de almidón de maíz o de flecha (para espesar)
- 1/3 de taza de miel o sirope de arce (para endulzar)
- 1/2 cucharadita de extracto de vainilla
- En un cazo de tamaño mediano, bate la leche de almendra y el almidón de maíz. Lleva la mezcla a ebullición a fuego medio, removiendo con frecuencia para evitar la formación de grumos. Cocina durante unos 5 minutos, o hasta que la mezcla espese lo suficiente como para cubrir la parte posterior de una cuchara.
- Retira el cazo del fuego y añade la miel o el sirope de arce y el extracto de vainilla. Deja que la mezcla se enfríe unos minutos antes de pasarla a un bol para servir.
- Cubre la natilla con film transparente y refrigérala durante al menos 4 horas, o hasta que alcance la consistencia deseada.
- Cuando esté lista para servir, decórala con una pizca de canela, si lo deseas.
Consejos para personalizar las natillas sin azúcar
Las recetas de natillas sin azúcar son muy personalizables, por lo que los cocineros caseros pueden fácilmente hacerse el postre propio. He aquí algunas ideas para inspirar la creatividad:
- Para una versión cremosa y golosa, considera la posibilidad de sustituir la leche de almendra por leche de coco o nata líquida.
- Para añadir un poco de crocancia y textura, añade un puñado de frutos secos, como almendras, pistachos o nueces.
- Para un Toque Tropical, añade plátano machacado y un poco de coco rallado antes de enfriarlo.
- Rocía con miel y espolvorea con canela para una presentación sencilla pero elegante.
- Las natillas sin azúcar tienen un sabor único
Los beneficios de las natillas sin azúcar para la salud
Las natillas sin azúcar no sólo son una deliciosa opción de postre, sino que también están repletas de beneficios para la salud. La leche de almendras contiene nutrientes esenciales, como magnesio y vitamina E, que ayudan a mantener un sistema inmunológico sano. La miel y el sirope de arce son una opción mejor que el azúcar refinado, ya que aportan antioxidantes y energía natural. Además, la adición de semillas de chía aporta un extra de fibra y proteínas, al tiempo que ayuda a reducir los niveles de azúcar en sangre.
Pensamientos finales
Hacer natillas sin azúcar en casa es una forma estupenda de disfrutar de un postre sano y delicioso sin remordimientos. Con unos pocos ingredientes sencillos y algunas adaptaciones menores, puedes hacer fácilmente tu propia versión personalizada de esta delicia tradicional española. Lo mejor de todo es que el postre está repleto de ingredientes ricos en nutrientes que promueven la salud y el bienestar en general. Así que atrévete y date un gran capricho de natillas sin azúcar, porque no tienes nada de qué sentirte culpable.
